En sentido contrario

… Los pies presurosos para correr al mal, Proverbios 6:18
 
Introducción

 â€œyo no venía a este lugar”

Alguna vez te ha pasado que vas manejando y de repente, ¿terminas en una dirección que no habías planeado? Pudiéramos decir o pensar que es algo “inconsciente” o “automático” Es como si nos fuéramos en un viaje por un instante y cuando regresamos, nos dimos cuenta que no estamos donde debemos de estar. Ir a alguna tienda, comprar un artículo, ¿Por qué sucede esto? Lo que sucede es que en ocasiones olvidamos que nuestro cuerpo es solo un vehículo de nuestros pensamientos. El no se manda solo, el responde de acuerdo a lo que nosotros le ordenamos… “La frase célebre” cuando alguien está triste o frustrado, puede llegar a decir: “No me puedo levantar” cuando sabemos que solo es cuestión de levantarse. Otros dicen: Es que no puedo dejar de beber y alcoholizarse, en ningún momento su manos y boca y ojos le obligan a hacerlo, es un asunto de su pensamiento que los lleva a hacerlo.
 
Este proverbio, es muy importante para nuestra vida diaria, ya que Dios dice NO. A quien con sus pies corre a hacer lo malo, esto no significa que “los culpables son los pies” sino que los pies son la “acción” de nuestro “pensamiento” así que cuando corremos a hacer el mal, es porque nuestra mente ya lo programo y va a hacerlo por así decirlo, con los pies.

Correr a hacer lo malo es, por ejemplo:
 
· Frustrarnos al punto de airarnos y ofender o lastimarnos nosotros mismos
· Entristecernos al punto de no querer hacer mucho o abandonar proyectos
· Caer en la tentación al punto de “avergonzarnos por lo que hicimos”
 
Debemos aplicar en nuestro pensamiento la ley de Dios.

Aplicar la ley de Dios, es muy similar a como un deportista se prepara:
Dijo el salmista David: En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti. Salmo 119:11 

En palabras mas apropiadas a este mensaje:

En mi mente he guardado tu palabra para no correr hacia el mal
Aplicar la ley de Dios en nuestro pensamiento o corazón, es como lo hacen los deportistas.
 
El pensamiento y los pies (ejemplo)
En el deporte para que puedan tener resultados de victoria, ya sea de alto rendimiento, de habilidad, de velocidad, de fuerza, el “deportista” sabe que no solo es suficiente entrenar gran parte del tiempo, sino que hay una pieza clave que se llama “mentalizar”, y esto es porque “puede tener mucha capacidad, un buen mentor, lugares apropiados para crecer físicamente, pero si su mentalidad no esta “preparada para ganar, difícilmente lo lograra”
 
Ejemplo:

· Los pies no se mandan solos, ellos pasan por una orden de nuestro pensamiento
· Las manos, no ejercerán mas fuerza a la que nuestro pensamiento les ordene
· La precisión, no se enfocará a un objetivo si nuestro pensamiento no lo motiva
El pensamiento, es una manera de interpretar lo que hay en nuestro corazón, para ganar tiene que haber “corazón” involucrado.  â€œle falto cora…”
 
Así nuestros pies van a donde nuestro corazón los dirige:
Es necesario que nuestros pasos en la vida, tengan una dirección correcta, sana, confiada en que lo que vamos a hacer, no tendremos dudas que sin importar el “ritmo” ya sea “paso lento, pero seguro”, o “veloz, pero con propósito” podamos en todo momento llevar a nuestros pies a la bendición bíblica. Así que…
 
¿Como puedo dirigir mis pies en la dirección correcta?
 
· Fortaleciendo mi corazón en Dios

Jehová es mi fortaleza y mi escudo; En él confió mi corazón, y fui ayudado, Por lo que se gozó mi corazón, Y con mi cántico le alabaré. Salmo 28:7
 
Haz a Jehová tu fortaleza y escudo

Una fortaleza sirve para “soportar, sostener o resistir” algo. Nuestra mente a diario tiene que enfrentar decisiones, algunas económicas, sentimentales, académicas, espirituales, en donde pueden hacernos “cambiar de dirección divina” debido al grado de dificultad” El Salmista David “utilizaba a Dios como su fortaleza” en otras palabras “en él se sostenía” hasta avanzar a donde debía ser llevado por Dios. “fortalece tu mente con la esperanza de su palabra, las promesas, su ley, su gracia, su amor”

Gozándome en El

El gozo es una manera de expresar “fortaleza” ya que se deriva de una emoción de alegría o satisfacción. Todo paso que des en la vida, hazlo con la alegría que Dios esta a tu lado y no hay nada que temer

Cantándole a El

El cantar te ayuda a memorizar mejor, y sabrás caminar en dirección correcta. Un hermano en una ocasión contó que cuando escuchaba a unos niños cantar, la canción “cuidado tus ojitos lo que ven” cuando había la oportunidad de hacer algo inapropiado, el “recordaba la voz” de esos niños y esa canción y le recordaba a no hacerlo
 
· Procura el crecimiento espiritual

Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. 2 Pedro 3:18
El Apóstol Pedro le recordaba a la iglesia de aquellos tiempos a “crecer en Dios” crecer en Dios no solo es su palabra, sino también en “experiencias” en Dios. No debemos caer en una mentalidad conformista. Debemos de “practicar” una vida de experiencias en Dios, y ¿Cómo lo lograremos? Llevando nuestros pies a buscar mas a Dios, practica el ayuno, lleva tus pies a hacerlo, evangeliza, lleva tus pies a “compartir tu fe” recuerda que el crecimiento espiritual es “personal” tu solo debes hacerlo y claro que lo lograras

· Proponte metas

Y Daniel propuso en su corazón no contaminarse con la porción de la comida del rey, ni con el vino que él bebía; pidió, por tanto, al jefe de los eunucos que no se le obligase a contaminarse. Daniel 1:8
Estaba en un país cautivo y aun así, propuso su corazón a no hacerse como ellos.

Para proponernos metas debemos:

Definir a donde quiero llegar
Daniel su deseo era cumplir con el trabajo que tendría que hacer, pero sin comprometer su relación con Dios.  Así nosotros podemos trabajar, estudiar, hacer negocios, siempre que nuestro corazón se involucre y caminaremos en la dirección correcta que es “honrar a Dios”

Mide tu progreso

Daniel y sus compañeros fueron alimentados de verduras y agua Daniel 1:12-13 y diez días después ellos se veían mas sanos y fuertes que los demás que comían carne ofrecida a los ídolos Daniel 1:14-15. Cuando comienzas a medir tu progreso, lo mas lógico que sucederá es que el hecho de obedecer a Dios cada día mas, aumentaras en sabiduría, en templanza, en paciencia.
Se disciplinado

Una vez finalizado el plazo de preparación y ser presentados al rey, Daniel y sus amigos eran mas sabios que los mismos sabios del rey, Daniel 1:19-20 seguramente no dejaron la disciplina de su alimentación que no era la causa de su sabiduría si no mas bien “caminar en la ley de Dios” y esto se trata de “hacer el mismo ejercicio constantemente” todos los días para nuestro propio beneficio
 
Conclusión

Nuestros pies solo obedecen lo que nosotros “llevamos en nuestro corazón” por lo tanto es de gran importancia “pensar siempre en hacer lo bueno” ir en sentido correcto, esto nos llevara a tener acciones santas, bíblicas, saludables


Bendiciones,

Pastor Saúl Castañón
saul.castanon@cielosabiertoselpaso.com

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